viernes, 21 de septiembre de 2012

MI PRIMER RELATO


RESULTADO MUY SORPRENDENTE

Como ya os conté en mi historia anterior, era el primer día de las esperadas vacaciones. Mi madre decidió que era la hora de cargar el coche y dirigirnos a mi añorada Salobreña. Todo cargado, incluidos nosotros, ya estábamos como las sardinas enlatadas, eso sí, como a mi madre le gusta, bien ordenado y cada cosa súper encajada en su sitio.
Es la hora de salir, mi madre se pone las gafas, todos nosotros los cinturones y ¡en marchaaaaaaaa! El viaje iba transcurriendo tranquilamente. Yo cogí mi DS y no aparté la vista de ella hasta que escuché pasar una moto,¡ eso si que era una moto! Vi que la velocidad máxima permitida era 120Km/h y me sorprendí al comprobar que la moto iría a 160 o más, ¡eso no era correr, era volar!
Sobre las once de la mañana llegamos a Salobreña y en el portal estaban esperándome Álvaro y Jose. Todos nos saludamos y muy contentos me dijeron que ya teníamos planificada toda la tarde. Jose como un papagayo dijo:
-A las cinco bajamos a la piscina, nos bañaremos un rato y antes de que se nos pongan los dedos como garbanzos echados en agua, nos iremos ha jugar unas partidillas de Ping-Pon. Después, de ocho a nueve, hemos pedido pista para jugar al tenis .Y lo más importante ¡¡¡hoy hay un partidazo increíble!!!: Barcelona vs. Real Madrid y como no, nos reuniremos en mi piso después de cenar para verlo.
No quería ni pensar lo que me esperaría esta noche junto a tres madrileños y yo solamente para defender al Barça.
Seguimos al pie de la letra el plan de Jose y después del tenis subimos al piso, me duché y mientras mi madre preparaba la cena, o como mi amigo Álvaro diría, el banquetezo, me asomé por la ventana de mi dormitorio y vi a la izquierda el mar tranquilo y sereno y a la derecha Sierra Nevada a la que aún le quedaba una pequeña cantidad de nieve en la cumbre. Al verla imaginé que allí arriba, entre la nieve,todavía habría una que otra flor de las nieves que estaría resistiéndose al verano.
Cené y pasados unos minutos escuché a Álvaro gritar:
-Arturo, Arturo, rápido baja que va a empezar el partido.
Veloz como una liebre bajé las escaleras y al entrar en su piso comprobé que Jose Antonio, el padre de Álvaro y Jose tenía preparado el escenario ideal para ver un partido de fútbol: poca luz, solamente había encendida una pequeña lámpara de Tiffany que Pili tenía en la mesa del rincón, también una gran fuente de palomitas y como no, dos sofás uno para Jose y su padre y otro para Álvaro y para mí.
El partido comienza, los jugadores salen al campo, a la derecha el Barça a la izquierda el Madrid. El arbitro tira la moneda y le toca sacar al Barça. Iniesta pone el balón en movimiento, la primera jugada empezó. Los jugadores corren de un lado a otro, sin que ninguno de los dos equipos consigan meter el balón en la portería contraria. Así transcurre el primer tiempo.
La fuente que Pili nos preparó de palomitas estaba casi acabada . Mi madre nos trae un helado para refrescarnos, y decidimos salirnos a la terraza a tomárnoslo y allí comprobamos que todas las televisiones de la urbanización de enfrente estaban viendo el fútbol como nosotros.
Comienza el segundo tiempo, el Madrid sale como si le hubiesen puesto las pilas nuevas, pero Piqué, Dani Alves y Puyol no dejan que acaben la jugada.
Jose decide ir al baño y en ese momento, Pedro rápido como el viento, se adelanta y con un pase increíble deja el balón en los pies de Messi y GOLLLL GOLLL GOLLL.
Jose sale corriendo del baño, el pasillo y el salón estaban prácticamente sin luz, él no ve el jarrón y CRACCCCCCCCCCCCCCCCCCCCCC. El jarrón se hace añicos, pero lo que mas rabia le dio, fue que el gol lo metiera el Barça. Coge el cepillo y se dispone a recoger los trozos, en ese momento un pase de Xavi sobre Alexis y nuevamente el balon entra en la portería de Casillas GOLLLL,
GOLLL GOLLL .Jose se gira para ver el gol y con el palo del cepillo le da a la lampara y nuevamente CRACCCCCCC.
El partido acabo así Barça-2 Jose-2. Esa noche estuve contento por el Barça, pero no por mi amigo que le esperaba una buena cuando su madre bajase de mi casa.




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